Cómo responden los ejecutivos a los impactos económicos y la escasez de talento
Navegar por la trifecta de la inflación, la recesión y un mercado laboral ajustado.
La economía global posterior a la pandemia ha planteado un nuevo conjunto de desafíos para las organizaciones. En respuesta, los líderes empresariales están aprovechando sus experiencias de crisis anteriores preparando a sus empresas para un turbulento 2023. Se está formando una tormenta perfecta, con una combinación de altas tasas de inflación, una recesión inminente, escasez de talento, interrupciones en la cadena de suministro y tensiones geopolíticas, todo lo cual tiene un impacto significativo en los mercados locales y globales.
Los ejecutivos tienen que tomar decisiones difíciles. ¿Deberían invertir para mañana o reducir costos hoy? ¿Deberían enfocarse en mejorar la eficiencia de la fuerza laboral, las protecciones de salud y los flujos de talento internos, o deberían reducir la cantidad de empleados y reducir los salarios? ¿Tendría sentido vender partes de su negocio para liberar capital y ayudar a expandir su huella? ¿O deberían aumentar sus asociaciones estratégicas?
Si una recesión no es una barrera para el crecimiento, lo es una escasez de talento.
de los ejecutivos anticipan que tendrán dificultades para satisfacer la demanda con su modelo de talento actual
de los ejecutivos se sienten seguros de que pueden escalar rápidamente las necesidades de talento hacia arriba y hacia abajo
de las organizaciones están planeando dejar ir al personal, especialmente aquellos que operan en entornos competitivos difíciles
A pesar de los desafíos, existe optimismo entre los ejecutivos de que la demanda de los clientes aumentará y sus empresas superarán la tormenta. El problema es que, a pesar de que la alta gerencia cree que su talento puede adaptarse, su capacidad para aumentar y disminuir su fuerza laboral se retrasa rápidamente. Lo que está claro es que los aprendizajes de recesiones pasadas e incluso entornos inflacionarios elevados no son suficientes para sobrellevar el 2023 y prosperar. Lo que se necesita es un repensamiento radical de los procesos de las personas y los modelos de talento, y un mayor enfoque en la salud y la productividad si las personas y las empresas van a prosperar.
El talento ya no es solo un tema de RR. HH., es un problema comercial crítico y es una prioridad tanto para los directores ejecutivos como para los directores financieros.